Perspectivas del Desarrollo Perspectivas del Desarrollo
97
Año 5/No 1/ Marzo, 2019
ISSN: 2414-8903 Línea
LOS ELEMENTOS ENDÓGENOS Y EXÓGENOS QUE POSIBILITAN E INHIBEN EL
DESARROLLO LOCAL SOSTENIBLE DE LA REGIÓN DE YEGUARE, HONDURAS
Ante este contexto, RN (2019) y IF (2019) coinciden en que, los planes
estratégicos dirigidos al cuidado del recurso natural no ponen atención en el
ordenamiento territorial de la región, lo cual ha incidido en el incremento de
contaminación y el desgaste tanto del recurso hídrico como del bosque; los autores
coinciden en que es resultado de la escasa capacitación de los líderes municipales en
la materia.
En palabras de Estupiñán et al. (2017), los ejecutores centrales de la política
ambiental son los gobiernos locales; su gestión coordinadora debe concertar de
manera sistémica, a todos los actores del territorio, para trabajar en el cumplimiento
de los objetivos estratégicos del DLS con un uso ecaz y eciente de los recursos, en
armonía con el medio ambiente.
Atendiendo a dichas estrategias, cada alcaldía en Yeguare, tiene una Unidad
Municipal Ambiental (UMA), encargada del cuidado y manteamiento de la ora
y fauna del territorio; pese a esta acción gubernamental, DS (2019) señala que el
nivel de actuación depende de la autoridad a cargo, siendo deciente en algunos
municipios.
En lo que respecta a las condiciones físicas del territorio, la región ha perdido
cobertura boscosa y sufrido deforestación, provocadas en su mayoría por el ataque
del gorgojo descortezador, la tala ilegal, quemas agrícolas, incendios forestales y el
cambio de uso del suelo originado por los procesos de urbanización; en su conjunto,
estos factores propician la destrucción de su biodiversidad. En cuanto al recurso
hídrico, está siendo contaminado por aguas mieles del café que perjudican el aire
y las fuentes de agua (DS 2019). Asimismo, su disponibilidad se está reduciendo,
los suelos se han degradado y las principales actividades productivas se han visto
afectadas, con una tendencia a la baja, ya que el territorio depende en su mayoría de
la agricultura (MF 2019).
Debido al crecimiento urbano descontrolado, han disminuido en la región los
recursos naturales, porque ante el aumento de la población, su demanda es mayor
a lo que el territorio puede ofrecer (RN 2019); a ello se suma la escasa educación
ambiental y la falta de espacios para depositar la basura, por lo cual los desechos
sólidos se han convertido en uno de los principales contaminantes, situación que se
agudiza en temporada de lluvia, cuando las inundaciones provocan la obstrucción
de los alcantarillas. Además, la mayoría de los pobladores suelen deshacerse de los
desechos quemándolos, generado la liberación de metano, uno de los principales
gases de efecto invernadero, factores que en su conjunto se convierten en un riesgo
para la salud humana.